Mi nombre es Alma B. Sevillano, yo soy de Filipinas y trabajo como Voluntaria de las Naciones Unidas para la respuesta Haiyan y el programa de recuperación.

Cuando el tifón Haiyan, también conocido en Filipinas como tifón Yolanda, golpeó el país hace dos años, una gran cantidad de familias se vieron afectadas, muchos perdieron sus seres queridos. Algunos de ellos perdieron todo. Por ejemplo, yo. Mi casa fue destruida y perdí a mi marido. Pero sobreviví. Fue muy duro para iniciar una nueva vida otra vez, pero nunca perdí la esperanza. Con la ayuda del Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales, comenzamos a trabajar en la recuperación de nuevo.

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