El magnate anericano de bienes raíces y candidato presidencial republicano 2016, Donald J. Trump, renovó sus ataques en lo que él describe como terroristas extranjeros que se hacen pasar por inmigrantes y refugiados.

Hablando durante un acto de campaña en Portland, Maine, el polémico multimillonario covertido en político advirtió que esas personas son una amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos. "Estamos dejando que la gente venga de naciones terroristas que no se debe permitir porque no podemos fiarnos de ellos", afirmó Trump.

"No tienes idea de lo que son. Este podría ser el gran caballo de Troya de todos los tiempos", dijo. Trump a continuación citó casos en los que los inmigrantes procedentes de países como Afganistán, Irak, Marruecos, Pakistán, Filipinas, Somalia, Siria, Uzbekistán y Yemen, ha estado involucrados en terrorismo o en actividades de apoyo a los grupos terroristas.

"Un residente ilegal permanente de las Filipinas fue condenado por conspirar para unirse a Al Qaeda y los talibanes con el fin de matar al mayor número posible de estadounidenses", dijo Trump.

Por su parte, el senador estadounidense Brian Schatz de Hawái emitió un comunicado en defensa de los filipinos de las diatribas de Trump. Su estado ha sido un destino para los inmigrantes filipinos-estadounidenses desde principios de 1900.

"La última diatriba de Donald Trump qie sugiere que prohibamos la inmigración de países como Filipinas que están ayudando a luchar contra el terrorismo es otro ejemplo de su retórica imprudente que se basa en el miedo y la división y además demuestra que no es apto para llevar a nuestro país", dijo. El ex presidente George W. Bush, por ejemplo, designó en 2003 a las Filipinas como un importante aliado no-OTAN.

"Durante generaciones, los filipinos han hecho de Estados Unidos su hogar. Es su vibrante cultura, duro trabajo y fuertes valores losque han enriquecido nuestras comunidades y el hecho grande este país, no la ignorancía y la intolerancia racista de Donald Trump", declaró además.