Un grupo de manifestantes filipinos llegó a una disputada una isla en Filipinas en el Mar del Sur de China; una expedición arriesgada que puede provocar una fuerte reacción de China.

Cerca de 50 manifestantes, en su mayoría estudiantes, llegaron el sábado a la isla Pagasa en el archipiélago Spratly en una posición en contra de los que dicen es una rastrera invasión de la zona económica exclusiva de las Filipinas por Beijing, dijo Eugenio Bito-onon, el alcalde de la isla.

El "viaje de la libertad" (freedom voyage) llegó a las 8:30 de la mañana del sábado a Balabac Island en una lancha a motor, dijo a Reuters Bito-onon, y agregó que los manifestantes salieron del sur de Palawan el jueves con en el buen tiempo para hacer la larga travesía marítima.

El South China Morning Post informó que el organizador Joy Ban-eg, dijo que China no había intentado bloquear que lleguen a la isla, y que "su propio viaje fue un acto de desafío contra China". Describiendo su expedición como "un viaje patriótico", los manifestantes, encabezados por un capitán ex marino, planean acampar en Pagasa durante tres días.