Ocho personas estaban desaparecidas y se teme que hayan muerto ayer por la noche después de que un buque de carga volcó en mares tormentosos de la costa escocesa.

Una operación aérea y salvamento marítimo se puso en marcha después de que fue avistado el casco hacia arriba de la embarcación por la tripulación de un ferry que pasaba.

Pero las esperanzas de la noche anterior de encontrar sobrevivientes se desvanecían ya que las condiciones climáticas se deterioraron drásticamente y la búsqueda fue suspendida hasta esta mañana.

Un portavoz de la Agencia Marítima y de Guardacostas dijo: 'Hemos descubierto restos, pero en la actualidad no hay sobrevivientes en las inmediaciones. Tenemos que decir que en esta etapa no es particularmente alentador lo que vamos a encontrar".

Se dio la alarma a eso de 14:30 de ayer, cuando la tripulación a bordo del transbordador NorthLink Hrossey informó haber visto el casco hacia arriba sobresaliendo del agua, a unos 15 kilómetros al noreste de Wick en el Pentland Firth.

El buque siniestrado se cree que es el Cemfjord registrado en Chipre, que transportaba un cargamento de cemento y se dirigía a Runcorn, Cheshire.