Malasia, Filipinas e Indonesia están considerando establecer un corredor de alta seguridad a lo largo del Mar de Sulu y Sabah para hacer frente a la amenaza de piratería que ha resultado en varios ataques y secuestros este año, dijeron fuentes de la industria naviera y analistas marítimos.

Ha habido una serie de ataques que han puesto en peligro el movimiento de buques comerciales, lo que ha llevado a las negociaciones trilaterales entre estos países para encontrar maneras de asegurar la región bajo lo que se denomina como un programa IND-MAL-PHI.

El plan asume importancia porque miles de millones de dólares de mercancías se mueven de un lado a otro en barcos comerciales en las inmediaciones del Mar de Sulu, según estimaciones de la industria.

Los asuntos llegaron a un punto crítico en junio de este año, cuando Indonesia planteó problemas de seguridad sobre los envíos de carbón a Filipinas, cuando siete de sus marineros fueron secuestrados.